Antonio, cuando llegamos al salto en tu módulo, en la 2ª casa, vivía Julio Morales (sus hijos Alfonso y Maria Victoria) y al trasladarse a la calle de Emmedio, y quedar libre, la destinaron a almacen del negocio, 1º de Elias y después de Montecasti.
Maxi,  el bloque de Dª Julia estaba compuesto por una casa más que le dieron a ella porque también vivía Dª Nani y quizás alguna habitación correspondiera a la farmacia. Pensar que también había las casas de Uniseco. 
Goyo, a ver si nos dices el nombre de tu calle. Me suena como que era la del Monte y la de arriba la Alta,
antes de que empecemos a colocar a gente.
Como bien decía Maxi todos los niños juntos a lo que más jugaban era a hacer embalses. El se acuerda de los que hacían por las casas de Uniseco y yo de los que veía camino de la escuela a nuestra casa, eso quire decir que los hacíais por todas partes. A los más pequeños , pensar que no érais los mayores y eso le daba derecho a escoger los sitios, os dejaban por la parte de arriba, ocupando ellos los saltos más grandes en las partes más bajas y por ello con más responsabilidad. La calidad del terreno que llevaba mucha archilla ( de ahí lo de los bolindres, que ví hacer muchos y poner otros tantos a secar, ¡qué fábrica de bolindres teníais!) permitía hacer con las manos pequeñas balsas y la impermeabilidad de la tierra hacía que fuera posible la contención del agua aunque no fuera muy duradera. Cómo disfrutábais en medio de tal zafarrancho....  Igual que en la realidad, también pasaban accidentes y se iban las presas con el consecuente peligro del embalse de más abajo. Cuando tu pantano se iba te trasladabas al siguiente a ayudarles y así sucesivamente hasta que se iba el último donde ya estaba toda la gente o se acababa el recreo. Si era el recreo, a lavarse las manos a los lavabos de la escuela y si era después de la escuela, a dejar parte del barro en la toalla de casa. Yo como espectadora disfruté en aquel momento y ahora recordándolo.
Lo que Goyo decia de la pídola tambien estaba muy bien pensado ya que se formaban unas buenas cadenas de niños. Ya salieron los bolindres. Bueno, lo cierto es que estos niños disfrutamos mucho en nuestra infancia compaginando juego con escuela , de ahí viene el grato recuerdo que guardamos todos de esa época.   Paqui Martos