Hola,
Yo conocí personalmente a Lopecito.
En Catadau, Valencia. Años 60-70. Yo tenía entre 8 y 15 años cuando coincidí con él.
Era todo un caballero: traje claro, sombrero panamá y una conversación erudita, brillante y muy cercana.
Era familia lejana mía, como casi todos en Catadau.
Sus hijas se llamaban Mari Dora y Lola Inés. Recuerdo haber ido a su tienda en la playa de Cullera, allá por 1971.
En Catadau, se alojaba en casa de José Pablo Benlloch, en la Calle Mayor, muy cerca del Ayuntamiento y de la Iglesia.
Ayer aun recordaba yo cómo evocaba el pan con aceite que preparaban los trabajadores de la cosecha en las tierras altas de Valencia.
Y como pidió que, en la Telefónica de la "Plaza del Caudillo", se dispusiera de teléfonos con control de volumen, para los duros de oído.
Creo que conoció persecución -quizá cárcel- pero no puedo precisarlo.
Uno de los grandes señores de mi infancia/adolescencia.